viernes, 4 de agosto de 2006

News of the World!

Hola a todos, hermanos del metal y sucedáneos, el Doctor Jones y Armelita os desean unas felices vacaciones desde su retiro estival en el pais de la cerveza, la República Checa. Ciertamente esa es una de las cosas que antes se te olvidan al empezar a pasear por Stare Mesto o Mala Strana, que esto sea una república, porque Praga, sin duda está hecha para que en ella vivan Emperadores o, como mínimo Reyes, pero no una panda de demócratas. En fin, por lo menos lograron quitarse de encima a los Rusos sin armar demasiado follón -aunque nadie debe olvidar que fueron los americanos los que dejaron la ciudad a merced de los rusos a finales de la II Guerra Mundial-.

Políticas aparte, la ciudad es increible, hasta ahora hemos pasado por la Ciudad Vieja (Stare Mesto), la Ciudad Nueva (Nove Mesto) y el Barrio Pequeńo (Mala Strana), entre los tres barrios se distribuyen la mayor parte de los monumentos y edificios históricos de la ciudad, el resto de los barrios se reparten de forma radial alrededor de éstos tres y símplemente se llaman Praga 3, Praga 5, Praga 10, etc... No me enrrollaré con detalles sobre las excelencia arquitectónicas de Praga, símplemente es sublime, edificios góticos en perfecto estado de conservación, mezclados con otros renacentistas, barrocos e incluso modernistas, no en vano Praga esta ciudad acogió al checo Alfons Mucha, adalid del Art Nouveau. También es la ciudad natal de Frank Kafka y sus esquizoides novelas o donde Dvorak cultivó su música.



Por ahora hemos visto -aparte de callejear por la mayor parte del casco antiguo- el grandioso Castillo de Praga, el castillo más grande del mundo, que además se conserva en perfecto estado, con la Catedral de San Vito coronando la cima de la montańa y el pequeńo convento de San Jorge, con su basílica románica adosada, que aún conserva los frescos en las cúpulas del S XII, hoy -si el tiempo no lo impide- veremos la calle del oro, una calle dentro del recinto amurallado del castillo donde se apińan las casas del los antiguos alquimistas que buscaban la piedra filosofal, y el barrio judío, o mejor dicho, lo que queda del barrio judío, ya que dicho barrio de hecho, no existe -se lo cargaron cuando se instauró la libertad de culto y los judío salieron esn tropel del gueto. Al quedarse sus antiguas casas vacías, José II reconstruyó el barrio y edificó las majestuosas casas que vemos hoy día.



En fin, ya llevamos aquí cinco días y aún nos quedan unos cuantos, pero es evidente que habrá un montón de cosas que nos restarán por ver. Hemos pateado el casco antiguo de arriba a abajo y hemos ido andando desde el hotel hasta el centro -hay unos 5 ó 6 kilómetros-, lo que nos ha permitido conocer un poco la Praga no turística, con sus centros comerciales como los de cualquier ciudad espańola y sus tiendas normales de barrio. De hecho, el centro turístico de Praga es tan grande que parecen dos ciudades diferentes, una como un gran parque temático románico-gótico-renacentista-barroco-erótico-festivo y otra como adosada de aspecto gris y melancólico -y eso que es agosto, pero hace fresquito y llueve que da gusto-, con sus tranvías surcando las grandes avenidas mientras tocan la campanilla para avisar a los peatones.

En algunas zonas todavía está patente la impronta del comunismo, a pesar de que la ciudad hoy día está totalmente "capitalizada", aún se ven muchas personas mayores desempeńando trabajos de clase "c" con total dedicación, como mantener limpios los servicios públicos, mantener limpias las calles o arreglar los numerosos jardines. (Por cierto, he de decir que las calles están especialmente limpias, y no solo porque la gente encargada de mantenerlas así cumpla con su trabajo, sino porque existe un sentimiento cívico entre los checos que en Espańa, por ejemplo, dejó de existir con la reconquista de Granada). También cabe mencionar la efectividad del transporte público, Praga sólo tiene 3 lineas de metro, pero tan bien complementadas con una ingente red de tranvías y de autobuses, que no hemos tenido ningún problema para movernos por la ciudad. El nivel de vida en general está bastante igualado al de la Espańa de los ańos 90, es un poco inferior al de hoy día en Barcelona, sobre todo en productos de alimentación, pero no existen las gangas, vamos que te cuesta casi todo lo mismo que en Espańa, espero que cuando les venga el Euro no ocurra como nos pasó a nosotros, porque creo que tendrían muchos problemas si lo que hoy vale 100 coronas checas pasara a costar 100 euros (100 coronas = 3 euros).

Bueno, es evidente que se podría hablar durante horas sobre un ciudad como esta, pero son las 12 de la noche y mańana -si no pasa nada- nos levantaremos temprano para alquilar un coche (un Skoda, claro) y visitar algunas de las ciudades más representativas de la República Checa, como Karlovy Vary, Cesky Krumlov o Brno, a ver si nos aclaramos y podemos salir de la capital, que con tanto tranvía, puentes y ríos haciendo eses, no lo tengo muy claro todavía.


Dobrý vecer!

Jones & Armelita.

PD. Esto tenia fotitos, pero desde este miserable internet-cafe no me deja subirlas, ya lo hare cuando pueda.. y no, tampoco hay acentos.

ACTUALIZADO 15-12-06
Por fin he puesto los acentos y las fotos!!

3 comentarios:

Roy Batty dijo...

Viendo lo que nos cuenta el tío Matt, desde luego apetece pegarse una escapadita por allí, me lo apunto en "viajes pendientes".

Pasaos por la capilla del cementerio de Sedlec (cerca de Kutná Hora, al lado de Praga), tiene un osario que seguro que es de tu gusto, Jones.

Veraniegos saludos,

Batty

Doctor Jones dijo...

Fuímos, vimos y volvimos, Batty. En cuanto pueda subir las fotitos, lo haré, incluida la susodicha capilla de Kutná Hora -creo que haré un monográfico sobre capillas hechas con huesos humanos, esta es la tercera que veo, las otras dos, en Évora (Portugal) y, por supuesto, Roma. Si alguien sabe de alguna más que lo diga.-

Saludos a todos y nos vemos pronto!

Jones.

Doctor Jones dijo...

Por fin he pusto las fots, más vale tarde que nunca, dicen los impacientes...

Jones.